Voces en Movimiento es un equipo de profesionales que ha apoyado hace más de dos años al comité campesino en contra de la Represa Punilla en San Fabián, generando la contraparte técnica en las adendas de Evaluación de Impacto Ambiental, entre otras actividades.
La carta que se adjunta aporta antecedentes para desmitificar los únicos 2 impactos positivos que se han considerado para la aprobación del Proyecto Punilla en septiembre de 2010, como son la supuesta generación de energía, así como la generación de empleo para la zona.
Desmitificación de embalse para riego, desarrollo agrícola y generación de empleo:
Las centrales hidroeléctricas que se generan con las aguas mediante estas represas, optimizan la gestión de los embalses con un objetivo explícito de abastecer la demanda de energía eléctrica del Sistema Interconectado Central (SIC), mientras que la posibilidad de agua para riego sólo opera con restricciones mínimas establecidas para la temporada de riego inmediata, no considerando una gestión del agua con un horizonte de largo plazo. Como ejemplo de aquello, cabe destacar la productividad del Canal Laja Diguillín, el cual fue pensado para regar 63 mil há. y sólo terminó regando no más de 3.000.
Por otro lado, desde los inicios nuestra agrupación advirtió que el proyecto impulsado por el MOP sería ejecutado por privados, ya que la modalidad de construcción de obras de embalse por el Estado son necesariamente las concesiones, donde una empresa privada luego de una licitación financia la construcción de la obra, y posteriormente tiene derecho a operarla durante un número de años preacordado, cobrando a los usuarios por el agua entregada.
Si consideramos además que los argumentos que se esgrimen para indicar que este embalse beneficiaría a 25.000 personas, es porque existen 4.725 predios y suponen que cada familia tiene 5 integrantes, beneficiando a un total de 23.625 personas, sin censar con exactitud la composición en los núcleos familiares. Así entonces, en el proyecto no se indica el porcentaje de familias que aún no tienen regularizados sus terrenos, tipos y diversificación de fuentes laborales en los sectores que serán supuestamente beneficiados por el riego y por tanto se agrava la posibilidad que estas familias puedan acceder efectivamente a los DERECHOS DE AGUA, ello considerando los costos que implica por un lado regularizar los terrenos y por otro pagar derechos de agua o acceder a ellos por medio de remates. Con todo ello, sin duda alguna los beneficios de riego que se proponen terminarían sólo en manos de grandes productores agrícolas, sin mejorar la calidad de vida de este tipo de familias que ocupan sus predios para agricultura familiar y no necesariamente para producir y competir en un mercado global inequitativo. Además, existen estudios para la Provincia de Ñuble que demuestran una alta concentración en la propiedad de tierras en manos de unos pocos, generando una desigual distribución de ésta. Así también la Provincia ha cambiado su forma tradicional rural dando paso a una nueva ruralidad, apreciándose un aumento de actividades rurales no agrícolas y de alta ocupación femenina no formal.
Por otro lado, si consideramos que entre los impactos positivos se cuenta la generación de empleo, la comuna de San Fabián no se vería beneficiada, puesto que no cuenta con la mano de obra calificada para este tipo de construcciones y más bien todo indica que sucedería lo mismo que con la construcción de la Represa en Ralco, que en vez de ayudar al empleo profundizó la pobreza, ofreciendo empleos mal remunerados y de corta duración y acentuó problemas sociales como la prostitución, delincuencia y alcoholismo.
Desmitificación de impacto positivo generación de energía.
Considerando que la represa Punilla no beneficiará al riego, su fin no sería sino para alimentar de energía a proyectos de empresas mineras transnacionales (empresas que usan más del 40% del SIC).
Estudios recientes indican que desde el año 2000 ha decrecido la demanda energética en el país, y que no hay evidencias que ésta se duplicará al 2020, por tanto no hay riesgos de crisis energética.
Actualmente, con la capacidad del SIC, la población chilena está sobreabastecida de energía eléctrica y apenas usamos un 20% de ésta.
Por el contrario, es evidente que esto, lejos de afectar sólo a la comuna de San Fabián, es un problema país. Hoy está en licitación TODA LA CORDILLERA DE LOS ANDES y los ríos en beneficio de un reducido monopolio energético, cuyo fin, además de servir a empresas mineras es exportar el excedente.
Si se tratara efectivamente de pensar en un desarrollo verdaderamente sustentable, existen otras alternativas para generación de riego y energía a menor costo y para el real beneficio de la población.